Aplazada desde 2020 por la pandemia de Covid, los responsables del Instituto Secular Pío X consideran que las condiciones mínimas están reunidas para llevar a cabo esta importante Asamblea General. Los delegados de Guatemala y Colombia trabajarán en comunión virtual con los miembros de Canadá y Estados Unidos que se reunirán en persona en la Casa du Renouveau.
La reunión de los días 30 de abril y 1º de mayo no sólo permitirá presentar las distintas propuestas a la Asamblea General, sino que también dará la oportunidad de verificar el funcionamiento desde tres sedes diferentes.
Entre las diferentes propuestas, encontramos diferentes temas importantes: las opciones a tomar para asegurar el futuro del Instituto, la presencia de las personas mayores en la Familia, los medios de comunicación, la posibilidad de establecer un centro apostólico en América Latina, etc. Sin duda, en la Asamblea General se debatirán también otros temas.
Además de estos temas a discernir, los delegados de la Asamblea elegirán un nuevo Consejo General. Esta es una de las tareas más importantes que llevarán a cabo los miembros de la Asamblea General.
Desde hace algunos años, la preparación de la Asamblea General de 2022 corre a cargo de un comité de preparación, bajo la dirección de Guy Brodeur y Ginette Larose, pareja asociada y miembro del actual Consejo General. Con el apoyo de Suzanne Guérard, Réjean Langlais, Robert Marcoux y Huguette Labrecque de la región de Quebec, con André Plourde y Maryse Guérin de la región de Saguenay/Lac St-Jean, y con Miguel Ángel Avendaño Toledo de la región de Guatemala, han realizado visitas a las regiones, han recogido diversas ideas de propuestas para la Asamblea General y han procedido a la elección de los distintos delegados y suplentes.
La preparación de la Asamblea General es también espiritual entre los miembros del Instituto Secular Pío X. Se ha compuesto una oración que es retomada por los miembros y amigos de la Familia Apostólica para invocar la presencia del Espíritu Santo en esta Asamblea General.
Señor Jesús,
nos has llamado a seguirte
por el camino de la misión
y hemos respondido “¡Sí!”
Aún hoy,
nos invitas a entregar toda nuestra vida
para que seas mejor conocido, amado y servido.
Al prepararnos
para la próxima Asamblea general
da a la Familia del Instituto Secular Pío X
un nuevo impulso profético
para proclamarte con audacia y poder.
Que nuestros gestos y palabras
digan alto y fuerte
que eres el único Maestro y Señor,
Él que nos convida
a construir un mundo nuevo
de justicia, de paz y de fraternidad.
Mantén nuestra lámpara encendida
con el fuego de tu Espíritu.
Que sea presente
en cada momento de nuestro diario vivir
para calentar los corazones
de los hombres y mujeres de nuestro tiempo.
Que tu Espíritu les enseñe
que también son llamados
a la gran aventura del amor y de la santidad.
Así, juntos, podremos
renovar todo en Cristo.
Amén.